NOROÑA DEFIENDE USO DE AVIÓN PRIVADO EN COAHUILA: “ES TAXI AÉREO Y NO TENGO NADA QUE TRANSPARENTAR”
- martin contreras
- hace 3 días
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Viaje en jet y debate por austeridad

El senador de Morena admitió que se trasladó en un Socata TBM 850 durante seis horas para una gira por cuatro ciudades; negó uso de recursos públicos, evitó revelar quién pagó y citó que “cuando es necesario se puede”, en referencia a Sheinbaum

Gerardo Fernández Noroña desató una controversia nacional luego de ser videograbado descendiendo de una aeronave ejecutiva durante una gira de asambleas informativas en Coahuila, con paradas en Torreón, Francisco I. Madero, Piedras Negras y Ciudad Acuña, lo que reavivó cuestionamientos sobre la congruencia de la 4T con su política de austeridad republicana.
La difusión de los videos en redes y espacios informativos avivó la discusión sobre el costo y el financiamiento del traslado, mientras el legislador aseguró que se trató de una decisión operativa ante una agenda comprimida en un territorio amplio.
De acuerdo con reportes periodísticos, el vuelo se realizó en un avión de negocios Socata TBM 850 bajo la figura de “taxi aéreo”, con una tarifa referencial de 2 mil dólares por hora; fuentes estimaron alrededor de seis horas de operación más pernocta, para un total aproximado cercano a 14 mil dólares, equivalentes a un rango de 257–280 mil pesos según el tipo de cambio de la jornada del 8 de octubre de 2025.
Las rutas incluyeron salidas y arribos entre Toluca y ciudades coahuilenses, con tiempos ajustados para cubrir eventos consecutivos en dos días, lo que fue esgrimido por el senador como justificación logística.
El propio Fernández Noroña defendió su decisión al afirmar que “es un taxi aéreo” y que “cuando se requiere un vuelo privado, hay que hacerlo”, negando el uso de recursos públicos y rechazando que exista ilegalidad en su proceder durante la gira por Coahuila.
En sus declaraciones, sostuvo que la Presidenta Claudia Sheinbaum “ha dicho que cuando es necesario se puede” recurrir a este tipo de vuelos, colocando su caso en el terreno de las excepciones por razones de tiempo y cobertura territorial.
El debate escaló cuando el legislador se negó a transparentar quién pagó el servicio, afirmando que “no tiene nada que transparentar”, e ironizó con un supuesto patrocinio empresarial, comentario que multiplicó las réplicas en medios y plataformas digitales.
A la par, acusó que el video se difundió “de manera ilegal” desde ámbitos estatales, alimentando la narrativa de una operación política en su contra, mientras voces críticas insistieron en que el fondo del asunto es la rendición de cuentas sobre gastos y patrocinios en traslados aéreos.
La polémica se inserta en el marco de la austeridad promovida por la 4T, donde persisten llamados a evitar jets y helicópteros privados, y en el que ya se han documentado episodios similares que han puesto bajo la lupa a figuras de Morena por presuntos privilegios de transporte.
Análisis y columnas subrayaron la tensión entre el discurso oficial y la práctica, y pidieron claridad sobre el origen de los recursos aplicados en la gira coahuilense, ante la negativa del senador de revelar detalles financieros del vuelo.
Medios nacionales reconstruyeron la cronología con videos, entrevistas y notas explicativas: revelación del arribo en aeronave ejecutiva, estimación de costos por hora, respuestas del legislador en espacios públicos y su insistencia en que fue una necesidad operativa sin uso de dinero público.
El caso permanece en seguimiento a la espera de definiciones oficiales o aclaraciones documentales sobre la contratación del “taxi aéreo”, en tanto el senador adelantó que continuará con sus recorridos sin ofrecer más pormenores sobre el financiamiento de tramos privados.
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